Los niveles de colesterol de una mujer pueden aumentar durante o después de la menopausia, debido a la reducción de los niveles de la hormona estrógeno en el cuerpo. El estrógeno ayuda a regular los niveles de colesterol.
El colesterol es una sustancia cerosa, parecida a la grasa, que se produce en el cuerpo. Se clasifica en dos categorías según la lipoproteína que lo transporta. Existe el colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) y el colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL).
Cuando una persona tiene demasiado colesterol LDL, éste se acumula en las paredes de los vasos sanguíneos, provocando su estrechamiento. Esto puede causar dolor en el pecho o eventos de salud más graves, como un ataque al corazón.
Las lipoproteínas de alta densidad llevan el colesterol HDL al hígado, que lo elimina del organismo. Tener niveles altos de HDL es un signo de buena salud y un menor riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
La menopausia y los cambios en el colesterol
La menopausia es una etapa de la vida marcada por el fin de los períodos menstruales. Suele suceder entre los 40 y los 58 años. La menopausia no es un problema de salud, pero puede provocar síntomas como sofocos, sequedad vaginal, trastornos del sueño y cambios de humor.
Los cambios en los niveles hormonales provocan la mayoría de los cambios que se producen durante la menopausia.
Una reducción de la hormona estrógeno puede hacer que aumenten los niveles de colesterol LDL.
A continuación, exploramos la conexión entre el colesterol y la menopausia en mayor profundidad y examinamos los siguientes pasos que una persona y su médico pueden dar.
¿Cuál es la relación entre la menopausia y el colesterol?
Durante y después de la menopausia, los niveles de colesterol de una persona pueden aumentar.
Un estudio de 2018 confirma que las hormonas sexuales como el estrógeno proporcionan cierta protección contra las enfermedades del corazón antes de la menopausia.
Y un estudio de 2020 encontró que los niveles de colesterol total, colesterol LDL y triglicéridos eran mucho más altos en las personas después de la menopausia, en comparación con las personas en las primeras etapas. Los niveles de colesterol HDL se redujeron en todos los participantes.
El hígado desempeña un papel importante en el metabolismo al utilizar los ácidos grasos, los triglicéridos y el colesterol para satisfacer las necesidades metabólicas del organismo.
El estrógeno ayuda a regular el metabolismo de los lípidos en el hígado. Por ello, la disminución de los niveles de estrógenos durante la menopausia provoca un aumento de los niveles de colesterol LDL y triglicéridos.
Experimentar este descenso de estrógenos de forma temprana puede aumentar ciertos riesgos para la salud. Según la Sociedad Australiana de Menopausia, las personas que entran en la menopausia de forma precoz tienen el doble de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas, en comparación con las mujeres de edad similar que aún no han entrado en la menopausia.
Qué esperar durante la menopausia con el colesterol alto
El colesterol alto no suele presentar síntomas, y es posible que una persona sólo se dé cuenta de que lo tiene después de sufrir alguna dolencia importante, un ataque al corazón o un derrame cerebral.
Se recomienda revisar los niveles de colesterol al menos cada 5 años. Durante y después de la menopausia, se puede considerar la posibilidad de someterse a esta revisión con más frecuencia.
Cualquier persona con un familiar que tenga el colesterol alto debería preguntar al médico con qué frecuencia debería someterse a la revisión.
Los profesionales sanitarios pueden comprobar los niveles de colesterol mediante un análisis de sangre denominado perfil lipídico. Un laboratorio analiza la muestra de sangre para medir los niveles de
- Colesterol total
- Colesterol LDL, que puede ser perjudicial
- Colesterol HDL, que puede mostrar una buena salud
- Triglicéridos
Tratamiento para el colesterol
Algunas personas necesitan medicación para reducir sus niveles de colesterol. Las estatinas son el principal tipo de medicación para este fin.
Un profesional de la salud también puede prescribir una terapia de reemplazo hormonal (TRH). Un estudio realizado en 2019 descubrió que la TRH reducía los niveles de colesterol LDL después de la menopausia.
Dieta para reducir colesterol
Alimentos que deberíamos controlar, consumir menos, si queremos mejorar los niveles colesterol:
Grasas, sobre todo las de origen animal y las que se encuentran en bollería. Sustituir todos los lácteos enteros por desnatados (leche, yogur, quesos), la mantequilla por aceite de oliva. En cuanto a las carnes, hay que elegir las que tienen menos grasa como el pollo o el conejo. Se debería evitar la yema de huevo, los embutidos, la bollería y los fritos industriales.
Cocinar al vapor, freir sin aceite, o asar en la parrilla o la plancha. Usar aceite de oliva y en poca cantidad.
Existe también en el mercado: Controlcol, una opción que están usando muchas mujeres en esta etapa de la menopausia, si la dieta y el ejercicio no son suficientes para reducir el colesterol.
Conclusión
Los niveles de colesterol LDL pueden aumentar durante o después de la menopausia, debido a la reducción de los niveles de estrógeno en el organismo. Esta hormona ayuda al hígado a regular los niveles de colesterol. Tener el colesterol alto puede no causar ningún síntoma, pero puede contribuir a graves problemas de salud, como las enfermedades del corazón, los ataques cardíacos y los accidentes cerebrovasculares.
Lo bueno es que cualquier persona puede tomar medidas para prevenir o reducir el colesterol alto, y en este caso en particular, las mujeres en el ciclo de la menopausia. Es importantísimo ser físicamente activa, llevar una dieta saludable, mantener un peso moderado y realizar controles del colesterol periódicos.
*Imagen de blogdehla.com.